Entiende la diferencia entre los principales regímenes fiscales que existen para personas físicas y morales.
Uno de los principios básicos de los impuestos es que, si estás generando dinero por alguna actividad, una parte de ese ingreso debe destinarse a la autoridad fiscal para que esta, a su vez, la use para pagar servicios públicos, como hospitales, salarios y equipamiento de la fuerza pública y otras cosas que no pagas directamente de tu bolsa.
Por eso, todos los trabajadores tienen que estar registrados ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y, desde 2022, esta obligación se amplió a todos los mayores de 18 años, aunque no generen ingresos y se declaren ‘en ceros’. Dependiendo de la actividad económica que tengas, será el régimen fiscal en el que tendrás que darte de alta, lo que también aplica para las empresas y, de acuerdo a la forma en la que esté registrada, serán las obligaciones fiscales que deberá cumplir.
Estos son algunos de los regímenes fiscales más comunes para las personas físicas (es decir, individuos):
Régimen de asalariados
- Funcionarios y trabajadores del Estado
- Miembros de las Fuerzas Armadas
- Anticipos a miembros de Sociedades y Asociaciones Civiles
- Honorarios a personas que presten servicios a un prestatario en sus instalaciones
- Los comisionistas o comerciantes que trabajan para empresas personas físicas o personas morales
Régimen de actividades profesionales
- Doctores
- Periodistas
- Contadores
- Abogados
- Dentistas
Régimen de actividad empresarial
- Restaurantes
- Cafeterías
- Tiendas de abarrotes
- Escuelas
- Agricultores
Estos son algunos de los regímenes fiscales más comunes para las personas morales (es decir, empresas):
Personas morales del régimen general
- Sociedades mercantiles
- Sociedad civil
- Asociación civil
- Sociedad cooperativa de producción
- Instituciones de crédito, de seguros y fianzas
Personas morales con fines no lucrativos:
- Administradoras de fondos para el retiro
- Sindicatos
- Cámaras de comercio e industria
- Asociaciones civiles sin fines de lucro
- Donatarias autorizadas
Existen muchos otros regímenes fiscales que dependen de la actividad que se hará, por ejemplo, si rentas un inmueble o el que recientemente fue puesto en acción, el Régimen Simplificado de Confianza del que te platicamos aquí. Recuerda que lo mejor que puedes hacer, es buscar la asesoría de un experto antes de darte de alta ante el SAT.